Bernardo González de Lamadrid y Vélez de las
Cuevas, nació en Frama, localidad del municipio de Cabezón de Liébana (Cantabria) en el año 1745, en el seno de una familia de hidalgos. Fue un militar español
destinado en el Perú colonial. Allí le sorprendió en 1780 la sublevación del
líder indígena Tupac Amaru II. Bernardo fue hecho prisionero y estuvo a punto
de ser ajusticiado. Salvó la vida gracias a que muchos indios, incluidos
familiares de Tupac Amaru II, intercedieron ante este para que no lo matara, ya
que se había portado muy bien con ellos como propietario de unos importantes
telares que había en Pomacanchi. Bernardo consiguió escaparse y reincorporarse
al ejército español.
Al finalizar su vida militar en 1794, con el grado de capitán, vivió entre Sevilla y la localidad sevillana de Cantillana con su
esposa Manuela de la Maza Magallanes. Esta tenía vínculos con esta localidad. Bernardo era alcalde de Cantillana en 1798, donde tenía algunas fincas. Sus descendientes continuaron viviendo
en esta localidad.
Su hija Antonia nacida en 1805, en Sevilla, se
casó con Santiago Olavarrieta y Urquijo, dando lugar a la importante
familia Olavarrieta en Cantillana. Santiago vino de Llodio (Álava), porque
su hermano Francisco ejercía de juez en Sevilla.
Su hijo Bernardo también fue alcalde de Cantillana en
1842, siendo propietario de tierras y ganadero.
El famoso pintor cantillanero Ricardo López Cabrera nacido en 1864, también era
descendiente suyo, al ser nieto de su hija Mercedes.
Su esposa era sevillana y era nieta del también sevillano Antonio de Magallanes, cuyo nombre aparece en un documento del Archivo de la Real Chancillería de Granada, donde se puede ver que sería descendiente de familiares del navegante Magallanes.
El apellido González de Lamadrid, también se puede encontrar escrito como González de la Madrid o simplemente Lamadrid.
Este artículo se puede verificar documentalmente.
Autor: J. Carlos Fernández. Licenciado en Historia.
Cantillana
